Santo Domingo. – Un resultado positivo de COVID-19 es una noticia desalentadora que puede llegar a tener un impacto negativo en la salud, tanto física y emocional de quien lo padece y sus familiares, al igual que en el personal médico que asiste.
Así lo manifiesta la enfermera Virgilia Rodríguez, quien labora en el área COVID-19 del Hospital Rodolfo de la Cruz Lora. “Si no nos cuidamos ni nos vacunamos, no lograremos ganarle la batalla al coronavirus”, es el llamado que hace, apelando a la conciencia de la ciudadanía para evitar que los contagios continúen en aumento.
Desde que inició la pandemia, Virgilia padece de insomnio y explica que dicha situación se ha agudizado aún más luego del rebrote del virus.
“Emocionalmente me ha afectado mucho, desde que empecé a trabajar con pacientes COVID-19 me cuesta conciliar el sueño, es muy difícil para uno como personal de salud, cuando crees que vas a ayudar a alguien a vencer la enfermedad y ver como se te va de las manos y no puedes hacer nada”, expresa.
Virgilia cuenta que una de las cosas más difíciles para ella ha sido tener que distanciarse de su madre, esposo y demás parientes, para no exponerlos al virus, “he tenido que aislarme de mi propia familia, cuando salgo del hospital trato de no juntarme con ninguno, pero precisamente ellos y la esperanza de volver a abrazarlos sin temor, son mi motor para continuar luchando junto a los pacientes”.
Manifiesta que la fe en Dios y en su familia es lo que la mantiene de pie en los momentos más difíciles, “yo siento que nací para atender a los demás, un día juré que cuidaría enfermos y así será mientras el Señor me lo permita”.
La frase de batalla en la que se apoya es “un día estaremos juntos y lo lograremos”. Un tanto melancólica cuenta que extraña mucho volver a sonreír como antes y reunirse con sus seres queridos.
“Desde que esto pase y podamos celebrar, lo primero que haré será organizar una fiesta de acción de gracias para todas las enfermeras que han estado en la primera línea de fuego durante esta pandemia”.
La enfermera confiesa que trabajar en estos tiempos de pandemia ha sido muy difícil, agradece a Dios que la guía para ayudar a muchos pacientes que creían no lograría sobrevivir.
Las acciones individuales son esenciales para detener la propagación del COVID-19, actuemos con responsabilidad para cuidar nuestra salud, proteger a la familia y valorar el esfuerzo que hacen los médicos, enfermeras y todo el personal que trabaja en los centros de la Red COVID-19. ¡Elige bien!