Santo Domingo. – La reumatóloga Yulissa Paula del hospital Docente Universitario Doctor Francisco E. Moscoso Puello, destacó que la osteoporosis es una enfermedad que no tiene síntomas, por ello llamó a la población a comprender la necesidad del chequeo médico para evitarla.
La doctora Paula explicó que por lo regular la enfermedad no suele dar ningún síntoma, es por eso por lo que las personas no despiertan la curiosidad o algún interés de visitar un médico para estos fines.
La especialista advirtió que el mayor riesgo o complicación es la fractura, por lo que afirmó que si no es detectada a tiempo, el paciente va a pasar a un síntoma tardío.
«La enfermedad es silente, porque avanza sin darnos cuenta hasta que se produce la fractura, que es lo más temido», señaló la doctora.
En relación con el cuidado que deben tener las personas, la reumatóloga sugiere cuidarse, especialmente a las mujeres, debido a que esta enfermedad afecta en mayor porcentaje a las féminas que superan los 50 años.
Yulissa Paula sugirió consumir alimentos ricos en productos derivados del calcio, como son: la leche, el yogurt, queso. Además, recomienda el ejercicio físico, es decir, hacer una actividad diaria para mantener los huesos en formación.
La doctora exhorto a hacer un chequeo de rutina, cualquier persona que tenga un factor de riesgo o que supere los 50 años, debe realizarse la Densitometría Ósea, que es un parámetro que ayuda al diagnóstico de la osteoporosis.
La doctora Milka Álvarez que coordina el programa para pacientes con osteoporosis que funciona en el centro de salud tiene el Servicio de Reumatología. «Primero tenemos la consulta dedicada sobre todo a estos pacientes, con factores de riesgo; segundo aquí se les hace la densitometría; tratamientos que incluye la entrega de los medicamentos facilitados por el programa de Medicamentos de Alto Costo y Ayudas Médicas del Ministerio de Salud Pública«, añadió la galena.
La osteoporosis es una enfermedad crónica y progresiva que se caracteriza por una disminución de la masa ósea y un deterioro de los huesos, lo que aumenta la fragilidad y el riesgo de sufrir fracturas.